Sobre la revolución. Hannah Arendt
Me han regalado esta mañana el ensayo de la politóloga Hannah Arendt titulado "Sobre la revolución" (Ciencia Política. Alianza Editorial). En él, por lo que he podido leer, la autora Alemana diferencia entre libertad y liberación. Libertad sería el acceso al espacio político de manera libre e inviolable. Los hombres ejercerán sus derechos en virtud de su participación política. Liberación por el contrario será la satisfacción de las necesidades de la gente. Para la autora es el concepto de libertad el objetivo final de una revolución. Grosso modo lo que termina por pervertir una revolución, según ella, es que esta se haga como una cuestión social para eliminar las diferencias de clase. Es decir, los esfuerzos encaminados a paliar las necesidades del pueblo solo pueden llevar a la opresión y a la tiranía. (Creo que éste es el motivo del regalo, ya que últimamente estaba radicalizando mi discurso).
Intuyo que la teoría de mi agasajador se basa en la idea de libertad, de la creación de un espacio de libertades en el que todos los individuos sean respetados en la inviolabilidad de sus derechos fundamentales. Y que es en este marco de libertad en el que se genera un debate dentro del "gobierno limitado" que velará por la continuidad constitucional.
En cambio, yo creo que la imposición de la tiranía es justificable para alcanzar la "liberación". Por tanto todos los medios para lograr eliminar la cuestión social son válidos. Mi amigo habla del "individuo contra el ciudadano" aludiendo a que en los últimos tiempos estamos más preocupados de nuestra individualidad que de nuestra obligación como conjunto y que la única solución a todos estos males de políticos corruptos y crisis económicas es la unión de los individuos como ciudadanos de plenos derechos en un marco político-social. Es decir, participando de él. Yo también pienso como él, existe un exceso de individualidad, pero la unión como ciudadanos no debe hacerse para participar en el dialogo político sino para solventar la "cuestión social" sea por los medios que sea, y ¡que cojones! La cabra tira al monte, para imponer la dictadura del proletariado.
*La foto es un autorretrato entre la gente. Detrás de todos ellos, en el reflejo del cristal, se me ve a mí realizando la fotografía.
7 comentarios
fabian -
Bryancito mariconsito amante de david -
rudy lp -
EL PODEEERR!!!!!!!
Verónica del Río -
(No estoy muy documentada que digamos, así que hablo un poco entre "a bulto" y "lo que me sale de las entrañas").
Creo que los fines no justifican cualquier medio, por muy ideal/bueno para todos, que sea si se alcanza.
Así que no no me gustan las dictaduras, el pensamiento único, etc.
Pero estoy totalmente de acuerdo en que hay demasiado individualismo y a la mayoría le importa un comino si con esta forma nuestra de vivir estamos fastidiando a todo el tercer mundo y aledaños, además del futuro del planeta - pues este consumismo y este modo de plantear la salida de la crisis me parece que es poner parches al mismo estilo, para perpetuar el mismo sistema destructivo.O sea, si salimos de ésta, es para meternos en otra igual o mayor, puesto que no hay cambios de políticas fundamentales - ni cambio en la mentalidad de la gente.
Un beso.
Verónica
P.D.:Llegué por casualidad y, como hay pocas entradas, lo he leído todo. Me has caído muy bien.
Ariscipo -
un saludo compis
Rocketón -
Si lo único a lo que podemos aspirar es a nivel individual y todos los derechos individuales están al mismo nivel, la conclusión es que no existe capacidad ni derecho de respuesta ante cualquier situación de injusticia.
Porque habría que ver, según este modo de concebir las cosas, qué derecho fundamental está antes, el del trabajo o el del beneficio. Según los últimos acontecimientos de rescates de bancos está claro que prima el derecho al beneficio.
Adviértase la gran aberración ética que supone considerar un derecho fundamental el del beneficio y equipararlo al del trabajo.
Plantear que una revolución se pervierte cuando trata de anular las diferencias de clase no deja de ser una toma de posición de clase... anti obrera, claro. Y esta tía lo radicaliza al máximo pero la socialdemocracia lo hace a un nivel inferior pero no menos perverso porque es más asumible por la población. Acuérdate de las nacionalizaciones del Tío Hugo o Evo la respuesta que obtuvieron entre la progresía española.
A partir de aquí, poco más se puede decir, brodel, salvo que tratarán de disfrazar con un discurso de libertades su práctica plutocrática y al final no tendremos libertades ni liberaciones ni mierda en las tripas.
Amparito -
Muy interesante, pa pensar